En Cabalá 20 representa a la sefirá de la corona, Keter, porque es la guematria de su primera letra כ, y además porque comprende las 10 sefirot concientes y las 10 sefirot inconcientes. Por otro lado es la unión de las 10 sefirot de los Mundos Creados, y el hombre en especial y las 10 sefirot Divinas con las que el Creador creó.
En hebreo plata es kesef, כסף, y es similar en Cabalá a kisufim, que significa añoranza o deseo, en referencia a la añoranza del alma por llegar a conectarse con el Creador y volver a su raíz en lo alto. Olam hakisufim, el mundo del deseo Supremo, el amor infinito de Hashem por la Creación.
Esas 20 monedas de plata representan la Providencia Divina que controlaba cada acto y que al final Iosef reconoce ante sus hermanos que lo que hicieron en realidad era algo bueno porque era de Dios.