En verdad la situación no es agradable y entiendo tu sentimiento. A veces los padres tenemos que soportar conductas de la pareja que nos afectan, pero por el bien de la familia tenemos que dejar pasar. A veces la pareja no cuenta muy rápido para confirmar la noticia, y evitar desilusiones si no llega a ser verdad. Incluso durante esos primeros meses el embarazo no está afianzado del todo hasta después del tercer mes.
Pero es algo normal y no pienses que tienen algo en particular contra ti. Porque no existe ninguna ley al respecto, aunque es una costumbre en muchos círculos religiosos. Esto no se aplica necesariamente a los abuelos y miembros de la familia inmediata, aunque algunos esperarán hasta después del primer trimestre para decírselo incluso a sus hermanos. Para el resto del mundo, muchos esperan hasta que ingresan al quinto mes.
Hace apenas una generación, el embarazo personal aún no era un tema de discusión pública, en la población en general, no solo en los círculos judíos ortodoxos. Así que, en esencia, es solo una cuestión de privacidad y discreción personal, no diferente de otros estados-del-cuerpo-que-no-son-asunto-de-nadie-más.
Un componente de esta práctica también parece ser la preocupación por el ain hará, el mal de ojo. Por la misma razón, tradicionalmente no verá mujeres judías celebrando baby showers, decorando la guardería o incluso comprando algo para el bebé antes del nacimiento.
Los meses de embarazo son una época muy preciosa y delicada. Como seguramente su médico le ha informado, la actitud, el comportamiento y las opciones nutricionales de la madre durante este tiempo tienen un impacto profundo en la salud y el desarrollo futuro del feto. Estudios médicos recientes también apuntan a los efectos del entorno físico y emocional en el feto. La mujer embarazada debe estar rodeada de un ambiente positivo, tranquilo y sereno. La ira y la ansiedad deben evitarse siempre que sea posible.
Lo mismo ocurre con el desarrollo espiritual del embrión y el feto; el comportamiento de la madre, así como su entorno, tienen efectos de por vida en el desarrollo de una nueva vida. Nuestros sabios animan a las mujeres a aprovechar los meses de embarazo aumentando sus buenas obras y su refinamiento espiritual.
Con este fin, la mujer embarazada debe asistir a los servicios de la sinagoga con la mayor frecuencia posible y participar en las clases de estudio de Torá .
Si bien todas las buenas acciones y mitzvot son beneficiosas para el feto, nuestros sabios enfatizan específicamente el valor de dar caridad adicional. Ser amable con los demás hace que Di-s nos trate de la manera correspondiente. Además de la caridad habitual que se distribuye, la caridad debe darse todos los días; tener una caja de caridad en casa facilita esta práctica. El momento más propicio para dar caridad es antes del Shabat o el encendido de velas de la festividad judía. En ese momento se debe dar caridad adicional, considerando que al día siguiente uno no podrá dar caridad, debido a la restricción al manejo de dinero en estos días santos.
Esto también tiene un componente práctico: la mayoría de los abortos espontáneos ( Dios no lo permita) tienen lugar en el primer trimestre, y los latidos del corazón del bebé suelen ser perceptibles aproximadamente en el momento en que el embarazo se hace evidente. Por lo tanto, una mujer no “hace público” su embarazo hasta que haya muchas posibilidades de que lo lleve a término y Dios esté dispuesto a dar a luz a un hijo sano.
Con respecto a no revelar la fecha de parto: Eso es solo para evitar las llamadas realmente molestas – “solo revisando cómo estás” – y los comentarios – “¡¿todavía estás por aquí ?!” – que comienzan a llegar alrededor de la fecha de nacimiento.
