El sabio tiene los ojos en su cabeza y arregla todo para que no le ocurra esto. En segunda instancia, restroactivamente su esposa cumplió por él, o que encienda velas eléctricas (con un cable eléctrico) y puede cumplir con esto, y si puede encender aunque sea una sóla vela y cumplir lo principal del precepto (aunque no sea perfecto) que trate de hacerlo también.