Ask The Rabbi

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categoría:  Dilemas educativos

¿Cómo se entiende el decreto de la vaca roja?

Nombre del rabino: Rabino Jaim Frim

Hola querido Rabino, respecto a la parasha Jukat, ¿Cómo se entiende el decreto de la vaca roja?

“Esto ha sucedido solo nueve veces a lo largo de la historia judía y según la tradición volverá a suceder. Conozca la Vaca Roja y la ceremonia que lo acompaña. ¿Quién necesita una vaca roja de todos modos? Antes de discutir qué hacer con la Vaca Roja es importante comprender la ley de impureza y pureza en el judaísmo. Muchos se equivocan porque la impureza significa falta de limpieza o la posibilidad de enfermedades infecciosas. De hecho Maimónides señala que la impureza es un “”decreto escrito”” que significa decreto sin ninguna razón.
Existen varios tipos de impurezas y cada uno tiene sus propias restricciones. Una de estas impurezas es una impureza muerta: una persona que ha tocado o se ha quedado debajo de un techo con una persona muerta es impura y se considera una persona impura muerta. Tal persona no debe entrar al templo o comer el sacrificio de la Pascua. Para salir de esta impureza tuvo que someterse a una ceremonia de purificación especial que involucraba alucinando el agua del fuego de una vaca roja.
El criterio: La Ley de la Vaca Roja aparece en Parashat Jukat (Números 19) donde está dicho:
“”Habla con los hijos de Israel y te llevarán una vaca roja perfecta que no tiene defectos que no ha soportado un yugo””. Nuestros sabios recuerdan en su bendición de que debe ser completamente roja y que si incluso tiene dos pelos negros no merece la pena; También se asegura de que no se haya utilizado para arar.
Luego en una ceremonia especial celebrada en el Monte de los Olivos matan a la vaca y la queman junto con cedro musgo y gusano. Finalmente las cenizas se mezclaban con agua extraída de un manantial y se rociaba con musgo. Las personas impuras estaban impuras durante siete días y la purificación en la mikve se llevaba a cabo al tercer y séptimo día de ser rociado. Luego tenían que sumergirse en un baño ritual y al final del séptimo día volvían a ser puros.
En la parashá en la que se dio el mandamiento Divino sobre la Vaca Roja el Creador del mundo comienza con las palabras “”Este es el decreto de la Torá””. En principio las Mitzvot de la Torá se dividen en tres categorías: “”Sentencias”” preceptos lógicos que pueden entenderse mediante un simple cálculo lógico. Prohibiciones como ‘No asesinarás’ ‘No robes’ y más; “”Testimonios”” una mitzvá hecha como un memorial de eventos que han ocurrido en la historia como Pesaj Shavuot y más; Y “”decretos”” los preceptos que no se puede entender a través de la lógica humana. El mandamiento de la Vaca Roja está incluido en la categoría de decretos los mismos mandamientos que no pueden entenderse en absoluto en cuanto a por qué Di-s nos lo pidió.
Y así Rashi lo define: “”Porque el Satán y las naciones del mundo (provocarán) a Israel diciendo: ¿Qué es este mandamiento? ¿Y de qué sirve? En consecuencia se establece un decreto. ¡Así fue establecido y no tienes permiso para reflexionarlo!””
Incluso Shlomó el rey más sabio que todo hombre dijo: “”Yo profundicé todas estas cosas y la parashá de la Vaca Roja investigué pregunté y busqué. Busqué sabiduría y ella está lejos de mí””.
¿Y por qué Dios le dio al pueblo de Israel un mandamiento que no pueden entender? ¿No sería mejor para nosotros entender la razón de cada mitzvá y así aclararlas todas?
La Torá de Jasidut ve esto como un elemento clave de nuestra relación con el Creador del mundo. Debemos adherirnos a los preceptos con un apego irracional; Incluso cuando no entendemos por qué lo hacemos porque esa es la voluntad del Creador del mundo. Además incluso en los mandamientos que entendemos con nuestras mentes no solo debemos seguir a Hashem por la razón sino que también debemos bregar por el fundamento Divino por encima del intelecto.




Fuentes

Shulján Aruj, Leyes de la Mikva, Capítulo 11.

Rashi, Números 10:2

Midrash Tanjuma, Parashat Jukat