No existe ninguna persona que sea completa, como está escrito que no hay tzadik que viva en este mundo y no haya pecado. Cada uno tiene algún lugar vacío que llenar. Pero lo que sí podemos entender, es a aquella persona que no recibe porque no sabe que tiene una carencia, o sea, una persona que tiene un problema, tiene una dificultad pero que sabe que lo tiene. Él piensa que está completo y no está dispuesto a recibir nada más. Es también una forma de interrumpir el flujo de divinidad de luz de la creación. En el tzadik es diferente. A parte de que el tzadik, por estar investido en el cuerpo tiene cierto ocultamiento de la luz, cierta carencia, a pesar de esto, el tzadik está unido a HaKadosh Baruj Hu. Si nosotros hablamos de HaKadosh Baruj Hu, si hablamos de la esencia de Di-s infinita, no podemos hablar de carencia porque a Él nada le falta. Simplemente, tiene placer y tiene deseo de que existan los mundos. Entonces, el tzadik verdadero no hace algo porque le falta, sino porque él está anulado completamente a Di-s, es uno con Él, siente placer superior por aquello que está haciendo, y en definitiva, su voluntad está absolutamente subyugada al placer, y ese placer es completamente uno con la fé. Tenemos que entender también qué es fe.
Emuna surge la palabra amén. Amén significa: nosotros tenemos fe en eso. Ambas palabras comienzan con em (Alef – Mem). “Em” significa madre, entonces, la Emuná es la madre, es el origen, la raíz de todas las cosas que sucedan luego. La emuná en su nivel superior, justamente en ese nivel que rodea los mundos, esa luz infinita que viene antes de la contracción inicial. El tzadik está unido a Di-s por encima de la creación de los mundos y por encima de todo ocultamiento. Para él no hay libre albedrío, no hay ninguna duda, y el único interés que tiene el tzadik es llenar sus días de vida con más y más acciones, y mitzvot.