El problema con el juego es doble. Uno es que el jugador no está ocupado en forma productiva, lo que va en contra del plan que Di-s tiene para el mundo. Esto se aplicaría solamente a un jugador profesional y no a uno que sólo ocasionalmente juega por entretenimiento. El Segundo problema es que el perdedor en realidad no quiere pagar, por lo que tomar su dinero es una forma de robo. El perdedor se ve obligado a pagar para evitar el estigma de ser llamado a un tramposo.