Uno podría, en términos generales, decir que la ley judía permite (y a veces incluso alienta) la expresión artística, pero con algunas excepciones importantes. Basado en el pasaje que se encuentra en Éxodo 20: 20, la Torá Oral (cuyas bases se encuentran principalmente en el Talmud) prohíbe la representación de: • La luna, el sol, las estrellas o cualquier visualización de los ángeles, incluso como representaciones dimensionales • Formas humanas en relieve o 3D completo. • Cualquier imagen que está siendo creado con el propósito de una práctica idolátra. Históricamente hay un montón de pruebas de mosaicos de azulejos o bordados sobre temas bíblicos – al menos alguno de los cuales probablemente se haya realizado bajo aprobación rabínica. Pero aun así, mi sensación es que el énfasis judío estaba en la artesanía en lugar de las bellas artes.